El enfoque conocido como Dollar Cost Averaging (DCA) es ampliamente aceptado en el ámbito de las inversiones, siendo una sugerencia común dirigida principalmente a aquellos que se aventuran en la inversión por primera vez o desean colocar fondos disponibles en el mercado financiero.
Consiste en distribuir una inversión en diferentes periodos de tiempo con el objetivo de alcanzar un "precio de compra promedio".
Ha sido objeto de extenso estudio, especialmente en relación con las siguientes preguntas: ¿contribuye a reducir la volatilidad de una inversión? y ¿en qué medida el DCA superaría a una estrategia de invertir en el momento inicial (conocida como Lump Sum o LS en inglés)?
La lógica detrás de esta estrategia es evitar el riesgo de invertir justo antes de grandes caídas, dividiendo la inversión en varios momentos para disminuir este riesgo.
Sin embargo, existen otros tipos de riesgos que se pueden medir de diversas maneras. En este análisis, se centra principalmente en el riesgo de que el valor de la inversión al final del horizonte objetivo no alcance las expectativas, así como el riesgo de que este valor sea significativamente inferior a lo esperado.
Para ello, se llevan a cabo análisis con precios históricos para inversiones a 5 años y se evalúan las distribuciones de rendimiento de estas estrategias, aplicando tanto LS como DCA, para medir su efectividad en términos de reducción de riesgo y el costo asociado a esta disminución potencial de riesgo.
Los resultados muestran principalmente que la aplicación de DCA en un activo que replica el índice S&P500 (que agrupa a las 500 empresas más grandes del mundo) implica una disminución del retorno esperado, al mismo tiempo que empeora el perfil de riesgo, medido como riesgo de cola (VaR o CVaR).
También se observa que la estrategia de DCA puede ser superada, tanto en retorno como en riesgo de cola, por una estrategia LS sobre un portafolio de igual volatilidad que el proporcionado por la estrategia DCA.
Estos resultados se mantienen incluso si el capital no invertido en el portafolio objetivo devenga tasas de fondos de Money Market.
La recomendación, por lo tanto, es invertir en un instrumento con el nivel de riesgo deseado tan pronto como se tenga el capital disponible para la inversión.
La métrica de riesgo más ampliamente utilizada en la evaluación de inversiones es la volatilidad, que corresponde a la desviación estándar de una muestra. La Teoría Moderna de Portafolios (Markowitz, 1952) fundamenta sus resultados en la combinación de retorno esperado y varianza (el cuadrado de la volatilidad) de un portafolio.
A pesar de la prevalencia de la volatilidad, existen otras medidas de riesgo que ofrecen información diferente, y este estudio se centra en dos de ellas: el VaR y el CVaR.
El VaR (Valor en Riesgo) de un portafolio se define como el máximo retorno que podría tener en el caso de que se materialice un escenario dentro de los peores resultados esperados. En términos simples, si se ordenan de manera ascendente los retornos esperados de una distribución, el VaR es el cuantil correspondiente a un nivel dado.
El VaR proporciona un umbral para el retorno esperado que se superaría con cierta probabilidad. De este concepto se deriva el CVaR (Valor en Riesgo Condicional), que representa el promedio de los retornos esperados que se sitúan por debajo del VaR. En otras palabras, indica cuál sería en promedio el retorno esperado condicionado a que ocurra un escenario igual o peor que el del cuantil seleccionado.
La investigación sobre el Dollar Cost Averaging se centra en dos interrogantes: ¿contribuye a reducir la volatilidad de una inversión? y ¿en qué porcentaje de los casos superaría DCA a una estrategia LS?
La primera pregunta, aunque se abordará con un análisis de la implementación de la estrategia, tiene también una respuesta analítica directa: las diferencias en la exposición entre una estrategia LS y DCA se limitan al período de implementación, durante el cual no todo el dinero está invertido. Al finalizar este período, la exposición al portafolio es idéntica en ambos casos y las variaciones experimentadas son iguales en términos relativos.
Además, durante la implementación, el portafolio de la estrategia DCA es una combinación del portafolio objetivo y la caja, con una volatilidad del 0%. Por lo tanto, la volatilidad en el período será estrictamente mayor en LS, y lo mismo ocurrirá al analizar todo el lapso de la estrategia.
En relación con la segunda pregunta, una respuesta analítica podría depender, en promedio, del retorno esperado del portafolio objetivo. Considerando nuevamente que durante la implementación la estrategia DCA tiene un retorno promedio entre la caja (0% para el análisis inicial) y el portafolio, la única diferencia en términos de retorno será el obtenido en ese período. Si la esperanza es positiva (o mayor que la rentabilidad de la caja), la estrategia LS debería tender a ser más ventajosa.
No obstante, este enfoque analítico no es concluyente para afirmar que la estrategia LS sea superior, ya que no hay garantías de que los retornos de los instrumentos en cuestión sean positivos.
El primer análisis se centra en comparar una estrategia de inversión tipo Lump Sum (LS) con una estrategia que divide la inversión en varios períodos de tiempo. En este enfoque inicial, el dinero no invertido se mantiene en efectivo sin generar rendimiento, simulando posiblemente el escenario más realista y práctico para un inversionista minorista, ya que no contempla la necesidad de mantener inversiones paralelas que deben ajustarse con el tiempo. Estas restricciones se levantarán más adelante en el estudio.
Para el análisis, se utilizan los rendimientos totales históricos del ETF SPY desde el 1 de enero de 1994 hasta el 31 de diciembre de 2021. Este ETF sigue el índice S&P 500 y representa a las 500 empresas más valiosas de Estados Unidos, sirviendo como un portafolio representativo del mercado.
Se compararán los retornos ex post a 5 años de una estrategia LS y dos estrategias DCA: una con un período de implementación de 12 meses y otra de 24 meses. Durante este tiempo, se invertirán fracciones idénticas de 1/n en cada mes, donde n es el número de meses.
Estadísticas:
- LS: Media 62,54%, Volatilidad 63,11%
- DCA 12 meses: Media 55,20%, Volatilidad 55,96%
- DCA 24 meses: Media 47,29%, Volatilidad 47,61%
- VaR 2,5% y CVaR 2,5% indican riesgos de cola.
Resultados:
1. La implementación de DCA reduce la volatilidad de la estrategia de inversión, siendo más pronunciada a medida que se extiende el período de implementación.
2. La media de retorno disminuye con la implementación de DCA.
3. Los riesgos de cola aumentan al implementar DCA, según VaR y CVaR. Los peores escenarios esperados son peores que los de la estrategia LS.
Se cuestiona mantener el dinero no invertido en una caja que no genera rendimiento. Se examina el rendimiento de una estrategia DCA en la que el dinero no invertido durante el período de implementación se mantiene en un fondo de Money Market (MM), a pesar de sus costos de transacción más altos.
Estadísticas:
- LS: Media 62,54%, Volatilidad 63,11%
- DCA 12 meses: Media 56,88%, Volatilidad 56,60%
- DCA 24 meses: Media 50,53%, Volatilidad 48,65%
- VaR 2,5% y CVaR 2,5% indican riesgos de cola.
Resultados:
1. A pesar de incluir una inversión en Money Market, el efecto de aplicar DCA se mantiene, aunque atenuado en todos los aspectos: cambio en volatilidad, riesgos de cola y rentabilidad esperada.
2. Mayor efecto al extender el período de implementación de la estrategia.
Se discute la volatilidad como medida de riesgo y se evalúa si DCA es eficiente en disminuir la volatilidad de un portafolio. Se crea un portafolio (ASVP) como combinación lineal entre el activo SPY y una tasa libre de riesgo.
Estadísticas para ASVP 12 meses:
- LS: Media 62,54%, Volatilidad 63,11%
- DCA 12 meses: Media 56,88%, Volatilidad 56,60%
- ASVP 12 meses: Media 57,36%, Volatilidad 56,70%
- VaR 2,5% y CVaR 2,5% indican riesgos de cola.
Resultados:
1. ASVP 12 meses muestra una disminución significativa de los riesgos de cola en comparación con la estrategia DCA de 12 meses, a pesar de mantener una rentabilidad similar.
Se repite el análisis con ASVP 24 meses, observando una mayor reducción de los riesgos de cola.
Se realiza un análisis en el que se compara la estrategia LS con una estrategia DCA aplicada durante 12 meses, con la diferencia de que el período de implementación se replica para realizar la venta después de cumplir el plazo de inversión de 5 años.
Resultados:
1. Esta estrategia reduce significativamente el riesgo en volatilidad y riesgos de cola, con una leve disminución en la rentabilidad.
2. Se destaca que esta estrategia tiene un período de implementación diferente y se utiliza en situaciones donde se necesita el dinero de forma gradual después del período de inversión.
En resumen, los análisis exploran diferentes enfoques de DCA, considerando costos de oportunidad, manejo de la volatilidad y estrategias alternativas como ASVP. Cada enfoque tiene sus implicaciones y se seleccionaría según los objetivos y restricciones específicas del inversionista.
Es esencial resaltar las limitaciones de este estudio y señalar que las conclusiones obtenidas no se pueden aplicar directamente a escenarios diferentes a los planteados, con otros tipos de activos o plazos distintos. Por ejemplo, al realizar el mismo análisis en los mismos plazos para el ETF QQQ, que sigue el índice Nasdaq, se observa que la estrategia DCA logra disminuir el riesgo de cola, especialmente debido a las fuertes caídas experimentadas por este tipo de activo durante la Crisis Dotcom.
Un aspecto no abordado en el análisis y que es digno de mención es que el riesgo en una estrategia DCA no es constante. Mientras que al principio la exposición al riesgo del portafolio es reducida, esta aumenta y se vuelve total hacia el final del período de implementación. En consecuencia, en ciertos momentos, un inversionista podría estar expuesto a un riesgo menor o mayor de lo recomendable para su perfil.
En el caso analizado, las estrategias DCA logran reducir el riesgo de una inversión solo si se mide como volatilidad. Resulta interesante observar que DCA es una estrategia subóptima cuando se busca disminuir el riesgo, incluso en términos de volatilidad, por lo que no se recomienda su uso con ese propósito.
La sugerencia final es buscar una inversión con un nivel de riesgo deseado y aceptable. Posteriormente, aplicar una estrategia LS sobre ese portafolio, que consiste en invertir cada vez la totalidad del dinero disponible destinado a la inversión, idealmente realizando esta acción de manera constante en el tiempo.